PRIMER AMOR
Recuerdo
cómo mi papá te trajo a mi vida cuando yo era una niña. No sabía lo mucho que
te había necesitado hasta que comencé a compartir mi vida contigo.
Estábamos
juntas todo el tiempo. Durante todos los recreos en la primaria, cuando nadie
se quería acercar a mí porque me tenían miedo, cuando me enamoré por primera
vez de aquel muchacho con cara de gato y piel tan pálida, todas las veces que
operaron a mi hermano, el momento en que mi abuelita se fue.
Estuviste estos
veintitántos años, siempre me abrazaste tan fuerte y me dijiste todo lo que yo
necesitaba escuchar. Me hiciste llorar tanto, me hiciste reír, me hiciste
pensar, me hiciste cambiar, hiciste de mi todo lo que soy.
Cuando
entré a la secundaria, me di cuenta de que yo también podía influir en ti, que
podía moverte. Entonces estuvimos más unidas que nunca.
Te
perseguí día y noche, te busqué en todo momento, te necesitaba tanto, eras lo
único que me mantenía en pie en esa época en que recién comenzaba a conocerme a
mí misma. Te amaba como solo un corazón adolescente puede amar.
Me
ayudaste a sobresalir, a enorgullecer un poco a mis papás ¿recuerdas cuanto
pasamos juntas al frente en el patio de toda la secundaria? ¿recuerdas cuando
ganamos ese premio de la revista? ¿recuerdas las calificaciones perfectas?
¿recuerdas en 2011, cuando comenzamos a compartir nuestro trabajo en internet?
¿recuerdas el esfuerzo de Veintiuno?
Ni
siquiera el tiempo tan arrasador que viví en la vocacional nos pudo separar. Si
bien nos alejó un poco porque ahí no eras del todo bienvenida, siempre procuré
llevarte conmigo, aunque sea de a poquito, aunque sea a escondidas.
Luego
nos escapábamos juntas a aquel lugar en Mar de Marmara que sólo nosotras
conocíamos y nos pasábamos miles de horas apreciando vivir.
Cuando salí de la
vocacional, mi corazón ardía de amor por ti, quería pasar mi vida contigo,
quería conocerte a la perfección, quería que en cada día de mi vida estuvieras
presente.
Pero mi papá dijo que
no, que no eras suficiente y yo tampoco lo sería si permanecíamos juntas. Fue
bastante cruel al traerte a mi vida y luego no permitirme permanecer contigo,
pero lo acepté estoicamente y comencé mi primer semestre de universidad
titubeando porque te sentía ahora un poco lejana, nos habían vencido.
No
puedo poner en tu boca ahora más palabras de las que ya te han puesto, de las
que yo misma te he puesto, pero estoy segura lo que me dirías ahora: lo estás haciendo bien. Perdón por dudar de ti y
negarte tantas veces, lo que pasa es que estaba muy asustada, tenía miedo de no
cumplir con lo que tú exigías de mí, de no ser lo suficientemente buena (aún me
aterra un poco).
Pero
apareciste de nuevo, lastimada y frágil, me abrazaste como si el tiempo no
hubiera pasado, me hiciste recordar lo mucho que te adoro y supe entonces que
no podía dejarte, íbamos a hacerlo juntas e íbamos a hacerlo en grande.
Hace
cuatro años que me decidí a entregarte todo, te he dedicado mi vida entera y sé
que no hubiese podido tomar una mejor decisión y ahora puedo apreciar en gran
camino que recorrimos. Aunque a otros ojos seas aburrida y te ignoren, para mí
lo eres todo. Juntas somos tan poderosas.
Gracias por nunca
dejarme ir, por alumbrar mí camino, gracias por hacer nacer en mí el amor y el
arte, por acompañarme durante toda esta vida. Gracias por hacer de mi lo que
ahora soy, no hubiera podido hacer esto sin ti.
Gracias por ayudarme a
expresar todo lo que abruma mi corazón, por enseñarme a compartir lo que siento
con los demás, por estar conmigo ahora mientras escribo esto y mañana camino a
la escuela.
No voy a apartarme
nunca, te adoro con toda mi alma.
·
En First Love, SUGA
relata su relación con su piano y la música. Me basé en eso para escribir mi
versión personal con la literatura/lengua. First
Love es sin duda una canción excepcional y sin precedentes en mi vida.
Without you there’s nothing
너는 내 손을 놓지마
두 번 다시 내가 널 놓지 않을 테니까
나의 탄생 그리고 내 삶의 끝
그 모든 걸 지켜볼 너일 테니까
너는 내 손을 놓지마
두 번 다시 내가 널 놓지 않을 테니까
나의 탄생 그리고 내 삶의 끝
그 모든 걸 지켜볼 너일 테니까